Los grandes líderes tienen determinación y visión, pero son humildes al respecto. Tienen en mente las ambiciones de la empresa, en lugar de centrarse sólo en su propio beneficio interno.

Los ejecutivos más eficaces no aceptan la mediocridad. No pueden aceptar la idea de que lo bueno es lo suficientemente bueno y nunca dejan que otros adopten esa creencia.

Para complementar el desarrollo de todo líder de impacto, he planteado 15 comportamientos y rasgos de los mejores líderes de negocio.

1. Aprender continuamente

Los líderes nunca están satisfechos con lo que saben. Diariamente, asignan tiempo para familiarizarse con los nuevos aspectos del negocio. Entienden que el aprendizaje es la mejor manera de salir de cualquier trampa. A través de un aprendizaje constante, tienen la confianza para probar muchas cosas nuevas, mantener las que funcionan y descartar rápidamente las que no.

2. Escuchen atentamente

Los líderes saben qué preguntas hacer y entienden cómo aplicar esas lecciones a su vida cotidiana. Se asocian con personas que pueden hacer cosas que ellos no pueden.

3. Tienen la habilidad de ver las cosas desde la perspectiva de otras personas

Los grandes ejecutivos poseen la habilidad de ver más allá de sus propios intereses y pueden considerar un asunto desde todos los ángulos posibles. Están libres de juicio cuando analizan una situación, lo que les permite comprender situaciones complejas al máximo.

4. Ver el panorama general

Al comprender los objetivos generales de la empresa, son capaces de dedicar su tiempo sólo a las actividades que impulsan la organización. Los líderes eliminan las tareas que no es necesario realizar en absoluto y pueden delegar eficazmente el trabajo que puede ser realizado por otros.

5. Aprender de cada experiencia

Prueban cosas nuevas, se arriesgan mucho y se toman el tiempo para aprender después de cada derrota o victoria.

6. Expanden su mundo de manera consistente

Mientras que la mayoría de las personas en están casadas con el status quo (es decir, piensan en pequeño y con seguridad), encuentran constantemente nuevas e innovadoras formas de hacer negocios.

7. Adquirir un pensamiento enfocado

Al eliminar las distracciones y el desorden mental, los líderes poseen la capacidad de concentrarse durante largos períodos de tiempo y, por lo tanto, pueden concentrarse en un solo tema y pensar con claridad. Los ejecutivos eficaces se centran en la contribución externa. Dirigen sus esfuerzos a centrarse en los resultados en lugar de en el trabajo en sí.

8. Consideran los problemas como temporales y superables

Una de las características que definen a un líder es que tienden a creer que la derrota es un revés temporal. En lugar de convertir los reveses en desastres, ven los obstáculos como retos a superar y, por lo tanto, se esfuerzan más.

9. Tratar eficazmente con la desaprobación

Los líderes no permiten que la aprobación o particularmente la desaprobación de los demás los influencie indebidamente. Cuando se encuentran con el rechazo, no les envía en una espiral descendente porque ven el rechazo como lo que realmente es – simplemente la opinión de otra persona que puede o no saber de lo que están hablando.

10. Desarrollan el potencial de sus colaboradores

Los líderes no dejan de mejorar su equipo, usando cada encuentro como una oportunidad para evaluar, entrenar y construir confianza en sí mismos. Para el gerente efectivo, cada día se trata de hacer crecer a la gente. Además, los mejores líderes se preocupan apasionadamente por su gente.

11. Tener visión

El líder tiene una idea clara de lo que quiere hacer profesional y personalmente, y tiene la fuerza para persistir ante los contratiempos e incluso los fracasos.

12. Poseer confianza en sí mismo

La confianza en sí mismo y la convicción deben ser innatos en el líder de hoy. Estos rasgos hacen que un gerente sea audaz y decisivo, lo cual es absolutamente crítico en tiempos en los que debe actuar con rapidez. Los grandes ejecutivos se sienten cómodos en su propia piel, lo que promueve un comportamiento decisivo.

13. Motivar a otros

La energía positiva hace que otras personas se animen. Entienden que las personas que se energizan pueden inspirar a su equipo a asumir lo imposible y disfrutar de hacerlo.

14. Aprender de sus errores

Todo líder comete errores, todo líder tropieza y cae. La cuestión es si pueden reagruparse y luego volver a ponerse en marcha con una renovada convicción, adaptabilidad y confianza.

15. Tener pasión

Los verdaderos líderes saben que no vale la pena llegar a la meta si no disfrutan del viaje. Aman lo que hacen.

Una de las mejores partes de liderar es esforzarse por ser mejor cada día en cada entorno donde se vea involucrado. Debe recordar que su equipo debe crecer a la par para poder desarrollar un liderazgo eficiente que genere resultados.

Artículo traducido y adaptado de Entrepreneur.