¿Estás experimentando un déficit de positividad? He aquí algunas formas de recargar y volver a centrarse.
En el momento álgido de la pandemia, me despertaba con miedo a mirar el WhatsApp, temiendo descubrir que la crisis había afectado a un ser querido.
Con todo lo que estaba pasando en el mundo, basta decir que no llevaba mi energía y actitud habituales al trabajo, lo cual, por supuesto, era totalmente razonable. Como líder, no creo que sea realista que todo el mundo sea todo sonrisas y sol todos los días.
Con el tiempo, a través de algunas pruebas y errores (y un poco de lectura), he descubierto pequeñas formas de recargar mi batería de positividad y restaurar un sentido de optimismo. Aunque seguramente no se trata de ciencia espacial, me gustaría compartir lo que he aprendido para que pueda ayudarte.
Ponte primero tu propia máscara de oxígeno
Todos hemos oído la explicación durante las advertencias de seguridad en los aviones: Ponte tu máscara de oxígeno antes de ayudar a poner la de otra persona.
El mensaje es que hay que cuidar de uno mismo antes de atender a los demás. Así que me aseguré de dar prioridad a cosas como la nutrición basada en plantas, el ejercicio diario y la meditación por la tarde. Dormir bien, meditar 10 minutos al día, caminar o hacer un circuito de entrenamiento de fuerza… incluso en pequeñas dosis, estos actos de autocuidado marcaron una gran diferencia en mi estado de ánimo y mi salud mental. Cuidar de uno mismo no resuelve necesariamente los problemas del mundo, pero te pone en la mejor forma de luchar para seguir adelante.
Profundizar en las relaciones, en todas sus formas
Somos criaturas sociales y prosperamos con la conexión. Esto ha sido un reto durante la crisis, pero con la relajación de las restricciones y la ayuda de la tecnología, podemos encontrar formas de llegar a los demás. Rodéate de tu familia, tus amigos, tus colegas, de quien sea que llene tu depósito. Aunque te compadezcas de los retos, es edificante saber que tienes seres queridos que siempre te cubren la espalda.
Mi mujer y mi familia fueron rocas increíbles durante los momentos difíciles, por supuesto, y mis colegas también fueron una fuente de camaradería. En Instagram, me relacioné regularmente con más de 500 empresarios que me inspiraron con su positividad. Sus publicaciones eran un recordatorio constante de que hay victorias y éxitos que celebrar cada día.
Consigue un gran impacto con pequeñas acciones
Una vez que hayas cargado las pilas, debes devolverlas a los demás puede ser el siguiente paso fundamental. Recuerda que no tienes que cambiar el mundo. Cualquier pequeña forma de convertir la intención en acción será suficiente. Devolver no sólo eleva a nuestros compañeros de trabajo o a los de nuestras comunidades: mejora nuestro propio bienestar físico y mental, ya que miramos más allá de nuestros retos personales y apreciamos el mundo más grande e interconectado en el que vivimos.
Este mensaje me lo transmitió una celebridad de Bollywood que hablaba en un acto de recaudación de fondos para Akshaya Patra (una ONG que proporciona comidas en las escuelas y que mi mujer y yo apoyamos). Le pregunté qué puede hacer la gente de a pie para marcar la diferencia, y me dijo: “Sólo hay que empezar por hacer una cosa”. Una llamada telefónica, un dólar, una hora. Eso es todo lo que se necesita.
Un punto de inflexión para mí fue la participación este verano en una mesa redonda con Zoom (facilitada por la Cámara de Comercio de EE.UU. y la Mesa Redonda Empresarial) con más de 100 directores generales de empresas mundiales como Accenture, IBM, Apple y JPMorgan, todos reunidos para averiguar qué podíamos hacer para ayudar con la situación de la pandemia en la India. Nuestra empresa desempeñó su pequeño papel, y se sintió muy bien con sólo encender la cámara y ver a otras personas de todo el mundo dispuestas a hacer algo. La oportunidad de que las empresas se conviertan en una fuerza del bien puede ser estimulante.
El retorno de la inversión en la retribución
Para ser claros, no se trata sólo de crear sentimientos cálidos para usted y su equipo. Los beneficios de la positividad en la salud mental, la salud física e incluso el retorno de la inversión para una empresa son infinitos.
En cuanto a los beneficios para la salud: La positividad aumenta la esperanza de vida y mejora la salud cardiovascular. También se ha demostrado que reduce los índices de depresión y los niveles de cortisol.
Mientras tanto, en el lugar de trabajo, la positividad es un aliado indispensable: fomenta la creatividad y mejora la capacidad de recuperación. Los entornos de trabajo positivos crean empleados más comprometidos y productivos, y se ha demostrado que los líderes centrados en la positividad inspiran a los trabajadores de forma mucho más eficaz que alguien que dirige con negatividad.
¿En resumen? El pensamiento positivo y el optimismo crean un círculo virtuoso de bienestar para todos.
Artículo traducido y adaptado de Entrepreneur
Francisco Esteban Pérez Yoma es un ingeniero y empresario chileno del sector inmobiliario. Estudio en el Saint George’s College y en la Universidad de Chile, donde se tituló como Ingeniero Civil.